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| Playa de Las Toninas, el domingo 27 de enero. Muchísimos turistas a pleno sol, pero más "gasoleros" |
Este acontecer contrasta con lo informado por los matutinos Clarín y La Nación, que publican como un "fracaso" la afluencia de turistas esta temporada en la costa atlántica de Buenos Aires. Incluso, el matutino de los Mitre, en su edición del domingo 27 de este mes, tituló como el presente, al "verano en el que la montaña le ganó al mar".
El Partido de la Costa abarca las localidades balnearias de San Clemente del Tuyú, Las Toninas, Santa Teresita, Mar del Tuyú, Costa del Este, Aguas Verdes, La Lucila del Mar, Costa Azul, San Bernardo, Mar de Ajó y Nueva Atlantis.
En la primera quincena, esas ciudades "recibieron a 537.000 turistas. Esto significa"un 4% más de personas que en el mismo período del año pasado", explicó el intendente Juan Pablo De Jesús.
Si bien la Secretaría de Turismo no dio las cifras de la segunda quincena, aún en curso, este medio pudo ver en Las Toninas y Santa Teresita las playas cubiertas de veraneantes, y por las noches las ciudades con miles de coches estacionados. En ambas ciudades, los negocios de las calles comerciales (la 1 en Las Toninas y la 2 en Santa Teresita) permanecen abiertos hasta bien entrada la madrugada, dada la gran afluencia de visitantes, mientras que estas arterias son cortadas al tránsito para ofrecer diversos espectáculos, como actuaciones artísticas, magia o pintura.
Claro que el hecho que los visitantes sean muchos, no significa que los comerciantes vendan en igual proporción.
"La gente gasta mucho menos y cuida más el bolsillo. Por ejemplo, si el año pasado pedían un sandwich cada uno, hoy piden uno grande y lo comparten entre dos o tres personas" contó a este medio Daiana, una amable empleada de un bar de las Toninas con vista al mar. "Es que los precios aumentaron mucho, a contramano de los sueldos", se sinceró la chica.
Además, estas dos localidades son el destino elegido por las familias. Así, mamá y papá, a los gastos de alquiler de un departamento (que aquí proliferan más que los hoteles), deben sumarle los de la comida y peticiones de los chicos, como plata para jugar en los locales de juegos electrónicos o para comprar objetos playeros. Por eso, las preferencias son comprar en casas de comidas para llevar o directamente, surtirse en un mercadito y cocinar "en casa", ya que una cena en un restaurante del centro comercial de Las Toninas no baja de los 90 o 100 pesos por cabeza. Además, en la playa una botella mediana de gaseosa cuesta 13 pesos y por la docena de churros o berlinesas,ideales a la hora del mate playero, hay que pagar 30 pesos.
Si bien Mar del Plata es elegida por muchos jóvenes que van en grupo de amigos, ofrece también similares características: muchos turistas, pero menos gastadores.
El clima de la primera quincena alternó entre días lindos y lluviosos en el Partido de la Costa, pero en la semana del lunes 21 al 28 de enero, todos los días fueron soleados y calurosos, salvo la tarde del miércoles 23, que tuvo un chaparrón pasajero (relámpagos y truenos incluidos) y el día siguiente, con frío y una pleamar que se devoró la playa hasta las 16.00, cuando el viento cambió, el agua comenzó a retirarse y el frío diurno se fue definitivamente, para dar paso el resto de la semana a una temperatura de 32 grados de máxima.
Todo sirvió para desmentir las publicaciones agoreras. Porque aún sin cifras definitivas, en la Costa Atlántica los turistas que disfrutan del sol se cuentan por miles. Y nada indica que la situación vaya a cambiar.
