Un hombre fue detenido anoche acusado de haber asesinado de cinco balazos en la localidad bonaerense de Villa Centenario al encargado de su edificio tras acusar a su hijo de 11 años de haberle abollado el auto, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.
El imputado, identificado por la policía como Carlos Alberto Rodríguez (59), fue detenido anoche en la estación Avellaneda, cuando intentaba huir en un tren.
El hecho ocurrió ayer por la tarde en los monoblocks ubicados en la calle Prensa Argentina al 1900 de la mencionada localidad del partido de Lomas de Zamora, y tuvo como víctima a Aníbal Oscar Rocha (46), el encargado de la torre 3 del complejo.
Fuentes judiciales y de la Jefatura Distrital Lomas de Zamora Norte explicaron a Télam que el conflicto comenzó el sábado pasado cuando el Peugeot 206 propiedad de la novia de Rodríguez y que éste usaba eventualmente para trabajar como remís, apareció abollado en el techo y el capó.
Voceros judiciales explicaron que fue una vecina de la torre 2 del complejo de monoblocks quien vio cómo saltaban sobre el auto, le contó lo sucedido a Rodríguez y señaló como autores de la travesura a dos niños que viven en la torre 3, uno de ellos, hijo del portero.
El mismo sábado, Rodríguez fue a buscar a los chicos que presuntamente habían abollado el auto, pero sólo se encontró con otro hijo del portero, de 16 años, a quien confundió con su hermano de 11 y lo increpó por lo que supuestamente había hecho con su auto.
Este adolescente contó hoy a la prensa cómo fue increpado por el ahora detenido.
"Supuestamente le contaron que mi hermano había saltado arriba del capot del 206. Vino acá, tocó el portero, pero mis papás no estaban, estaba yo solo con los perros. Me dijo `vos sos el hijo`, `sí` le dije, y me dice `vos me saltaste arriba del auto`", contó.
El adolescente aclaró que él le dijo a Rodríguez que no entendía de qué lo acusaba, que él no había dañado su auto, pero pese a ello, el hombre lo agarró "del cuello", hasta que "salió la administradora de la torre dos, diciendo que no", que él no era el chico y lo soltó.
El hijo mayor de la víctima afirmó que ese mismo sábado le contó lo sucedido a su padre y que a la noche, el mismo hombre volvió a tocar el portero eléctrico, pero que sus padres tampoco estaban.
El encuentro se dio al día siguiente, ayer domingo a las 17.30, cuando Rodríguez volvió a tocar el timbre en lo del encargado y Rocha salió a hablar con él.
Según los voceros, en la puerta del edificio Rocha le recriminó a Rodríguez el haber retado al joven de 16 y acusado al de 11 por algo que el chico decía no haber hecho.
"Se estaba cambiando, mamá le dice que tenga cuidado que no discuta acá en la puerta por problemas en el edificio", contó hoy el hijo de la víctima a la prensa sobre el momento previo al crimen.
"Mi papá salió, abrió la puerta y yo escuché que mi papá le dijo `qué pasa` y no sé qué le dijo el hombre y él le dijo `vos lo agarraste a mi hijo ayer y no hizo nada`", explicó el joven.
Una fuente policial explicó a Télam que Rodríguez decía que el sábado habían visto al nene de 11 dañando el 206, que "para él era muy importante porque al estar desempleado y en trámite por su jubilación, lo usaba para trabajar ocasionalmente como remisero".
La discusión fue subiendo de tono y Rodríguez extrajo un arma de fuego con la que le apuntó a Rocha.
"Tirame, tirame, dale tirame", lo desafió el encargado del edificio, tras lo cual, según los testigos, Rocha le efectuó varios balazos.
"Fue tomando valor y se le saltó la térmica. Lo mató de cinco tiros", dijo a Télam un jefe policial que participa de la investigación.
Una fuente judicial precisó que, según la autopsia, cuatro de los disparos le impactaron a Rocha en la espalda y el quinto en la nuca.
Rodríguez escapó y estuvo varias horas prófugo hasta que pasadas las 22 de ayer fue detenido arriba de un tren en la estación Avellaneda, "con un bolso que había preparado para su fuga", reveló un vocero.
La detención fue concretada por personal de la comisaría 7ma. de Lomas de Zamora, que no pudo localizar el arma homicida.
"El imputado nos dijo que se deshizo del arma, que aparentemente es un revólver, tirándola en una alcantarilla pero allí aún no se pudo encontrar porque hay que romper con albañiles", contó una de las fuentes consultadas.
La causa, caratulada como "homicidio simple", quedó a cargo del fiscal Fernando Semisa, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 12 del departamento judicial Lomas de Zamora.
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