Economista de Banco Ciudad explicó ante empresarios un mal pasado pero buen futuro

Enorme déficit fiscal que el Presidente Mauricio Macri está bajando, un presente con muy pocas mejoras económicas pero buenas a moderadas expectativas para este año. Ese fue el panorama que planteó el miércoles último en Lanús el economista en jefe del Banco Ciudad de Buenos Aires, Alejandro Espora, ante una platea llena de dueños de pequeñas y medianas empresas lanusenses.

El especialista económico disertó en un salón de la avenida Yrigoyen, en una exposición auspiciada por la Secretaría de Desarrollo Económico de Lanús, que tras la exposición de Espora, lanzó el Programa Clínica Tecnológicas.

Esa es, una iniciativa del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires que apunta a facilitar líneas de financiamiento y servicio de consultoría con el objetivo de que las empresas puedan conservar la competitividad en el mercado.

Espora culpó de la mala situación económica argentina al déficit fiscal, que se viene repitiendo desde 1950. El hecho de que el país gaste más de lo que cobra de impuestos "se solventa con deuda o con emisión, que provocan inflación que obligan a una devaluación, que trae más inflación", dijo el especialista. 

Por eso, ponderó los intentos del actual primer jefe de Estado de "bajar el déficit quitando el subsidio a las tarifas y al transporte".

Espora reconoció que el 2016 "fue un año muy difícil", con recesión. pero que este año, "el PBI crecerá entre el 3 y el 3,5 por ciento". Según el economista del Banco Ciudad,  "esta mejora se está empezando a ver tenuemente, con un alza en la cosecha de trigo, la producción de automotores ("crecieron un 100 por ciento los patentamientos) y en la construcción en la obra pública". Aunque reconoció, mediante gráficos, que la roducción de todos los demás rubros de la industria continúan en baja.

Además, especificó que hubo un gran incremento de préstamos UVA otorgados (Unidad de Valor Adquisitivo)  por lo que siempre el valor de la cuota a pagar será el mismo porcentaje del sueldo, que hace que "si antes, por un préstamo de un millón de pesos, se pagaba una cuota de diez mil pesos, hoy se paga una cuota de entre 6000 y 7000 pesos.

Racing está de luto: murió Juan Carlos Sierra, ídolo del mítico equipo de 1959

J. C. Sierra en el mítico Cilindro, estadio de Racing Club.

Juan Carlos Sierra, ídolo del Racing Club de 1959, falleció ayer a los 80 años en Rafael Calzada, en el sur del gran Buenos Aires.

El ex defensor de punta había sufrido hace unos años un ACV (accidente cerebro vascular), del que se recuperó parcialmente, pero el 10 de este mes comenzó a sufrir complicaciones físicas, por la que fue internado en un hospital de esa localidad, perteneciente al partido de Almirante Brown. 

Primero, Sierra sufrió complicaciones en el funcionamiento renal y luego tuvo una neumonía, cuadro del que no se pudo recuperar, y finalmente falleció en la tarde de ayer. 

Nacido en la localidad de Capitán Sarmiento pero criado en Gerli, Sierra se inició futbolísticamente en El Porvenir. En 1959, por una lesión del "Polaco" Wladislao Cap, Racing compró al hábil defensor, quien formó parte de un recordadísimo equipo que contaba en sus filas a Juan José Pizzuti y Rubén Sosa. 

Incluso, una vez recuperado Cap, Juan Carlos Sierra siguió alistando en ese equipo. Una repetida y evocada formación era: Osvlado Negri, Norberto Anido, Sierra, Julio Gianella y Juan Carlos Murúa; Wladislao Cap, Manuel Murúa, José María Ferrero, Juan J. Pizzuti; Ruben Sosa y Raúl Belén.

Tras ese torneo de 1959 en la Academia, Sierra se destacó en el Atlético Bucaramanga de Colombia. Luego de una estadía de dos años en tierra cafetera, el defensor retornó a nuestro país para dar sus últimas estocadas en Nueva Chicago y Flandria.

Sus restos fueron velados en Calzada y trasladados a un cementerio privado de Burzaco, donde serán cremados.

Esta noche, previo al partido que Racing disputará con Godoy Cruz, Sierra será recordado por todo el Cilindro de Avellaneda con un minuto de silencio, como se merece su figura y su historia.