Hace varios años, una empresa de servicios públicos abrió el asfalto de la calle Canadá casi Balcarce, en Villa Industriales, para hacer cambio de caños o tubos. No quiero mencionar la empresa porque hace tanto tiempo que ya no la recuerdo.
Pero sucedió lo que siempre sucede en estos casos: se fueron, vinieron a los pocos días y lo taparon como de favor y mal, y se fueron dejando rastro: el que vemos en la imagen, ya que con el paso de los camiones, los autos, la línea 188 cuando desvía su recorrido, los años y las lluvias, el asfalto o lo que le pusieron se fue rompiendo y los autos, para pasar sin romper el tren delantero, deben tirarse bien hacia un lado, junto al cordón, como se ve en la foto con el vehículo que acababa de pasar al momento de hacer click en el obturador de la cámara.
Encima, hay un problema derivado, o más vale un problemón: un camión no tiene lugar para esquivarlo, por lo que sus tres o cuatro trenes de dirección agarran el pozo de lleno, con lo que tiemblan los cimientos y, consecuentemente, las paredes de las casas de la cuadra, es decir de la calle Canadá al 1900, entre Balcarce y Manuel Ocampo, más cerca de aquella que de ésta.
Así que señores de Obras Públicas, manos a la obra. Arreglaron calles, faltan otras, pero el pozo de Canadá y Balcarce está vivito y coleando. Y los vecinos de la cuadra, que trinan.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario